En las últimas horas se dio a conocer una polémica situación que ocurrió durante la madrugada del pasado viernes 15 de agosto, teniendo como epicentro una comisaría.
El hecho, sin precedentes, ocurrió en la ciudad de San Pedro de Jujuy, donde un oficial de policía y su compañera, ambos en funciones dentro de la Seccional Nº 26 del barrio Belgrano, fueron sorprendidos por la esposa del oficial en una situación comprometida: ambos en ropa interior, aparentemente manteniendo relaciones sexuales en una habitación destinada al descanso de los agentes.
Escándalo en la comisaría de San Pedro de Jujuy: policía sorprendido en acto íntimo y denunciado por violencia de género
Foto: El Tribuno
Más de 10 presos intentaron fugarse de una comisaría patagónica: treparon al techo y cortaron las rejas
Este descubrimiento no solo rompió con las normas básicas de conducta dentro de un edificio público y policial, sino que desató una serie de hechos violentos que agravan aún más la situación.
VIOLENCIA Y DENUNCIAS: LA AGRESIÓN QUE SIGUE A LA DESCUBIERTA TRAS EL ESCÁNDALO
Al ser encontrados in fraganti, los efectivos policiales reaccionaron agrediendo físicamente a la mujer que descubrió la traición. Según informó El Tribuno, el oficial está imputado por “lesiones leves agravadas por el vínculo y por mediar violencia de género”, mientras que la compañera policial enfrenta cargos por “lesiones leves”.
Ante la gravedad de los hechos, el Ministerio Público de la Acusación intervino rápidamente, presentándose en la comisaría para tomar declaración a la víctima y comenzar una investigación a fondo. El fiscal Agustín Jarma asumió la responsabilidad de dirigir la pesquisa y prevé indagar a los imputados en las próximas horas.
Se desvinculó de la empresa, fue a cobrar la indemnización y le descontaron $12 millones de cuota alimentaria
De la traición a la justicia: caso de violencia de género en la Policía de San Pedro de Jujuy
Foto: Jujuy al Momento
Ante el escándalo y la gravedad de la situación, los dos policías involucrados fueron separados de sus cargos. Además, tanto la fuerza de seguridad local como el Ministerio Público iniciaron sumarios administrativos para evaluar las responsabilidades internas derivadas del episodio.
Más allá del debate moral sobre la intimidad en dependencias policiales, el caso refleja problemas serios de violencia de género que atraviesan incluso a las instituciones encargadas de proteger a la sociedad. La justicia podría dictaminar penas privativas de libertad para los responsables de las agresiones, marcando un precedente importante en la lucha contra este tipo de violencia.