El precio del dólar está en el ojo de tormenta de la City, debido a que pese a la baja acumulada que presenta en agosto, la tendencia que muestra el mercado en los valores negociados para fin de año es a la suba. Algo que ocurre en un marco de tensión por la escalada de las tasas de interés a niveles muy elevados y a la proximidad de las elecciones legislativas, que representarán una señal de apoyo, o no, al Gobierno.
Por ende, se presenta una serie de factores que le agrega incertidumbre a la economía, y algunos analistas están proyectando cuál puede ser la cotización más elevada que puede alcanzar el billete estadounidense para diciembre que viene.
En este marco, la cifra más alta que están esperando algunos economistas para el precio del dólar mayorista llega a ser de hasta un máximo de $1.559, según el último informe publicado por FocusEconomics, en el que encuestó a más de 40 analistas de bancos y consultoras locales e internacionales.
De llegar a esa cifra, en todo el 2025 la devaluación de la moneda podría llegar a ser de hasta 45%, un nivel muy similar al consenso previsto de inflación para todo el año.
El dato que enciende las alarmas es que dicha estimación más alta está coincidiendo con los precios que se están negociando en los mercados de futuros y opciones del Matba-Rofex.
En concreto, para fines de diciembre, se está operando en esta plaza un tipo de cambio de $1.535. Y para la finalización de febrero que viene se transa a $1.593, una cifra mayor que el «precio más alto» convalidado en el informe mundial por los economistas, para el último día de 2025.
En resumen, coinciden las proyecciones «más alarmistas» respecto a los valores operados en la plaza de futuros.
Otro aspecto que se ubica en el radar de los expertos es que el precio del dólar mayorista llegó a fines de julio a su referencia más alta de $1.380, es decir, se acercó «peligrosamente» al techo de la banda de flotación cambiaria establecida por el Gobierno, a mediados de abril pasado, en un rango entre $1.000 a $1.400, que se actualiza a razón del 1% mensual.
Así, para fin de año, la banda máxima actualizada podría ubicarse por encima de los $1.500, un valor que podría ser alcanzado o superado por el valor esperado por algunos economistas para fin de año. Salvo, claro, que para después de las elecciones haya un nuevo cambio de la política monetaria.
El precio del dólar más alto que espera el mercado
En conclusión, entre los economistas que estiman el precio de dólar mayorista más alto para fin de año se encuentran Empiria Consultores, con $1.559. Y luego se ubican Eco Go ($1.544), Analytica Consultores ($1.507), Oxford Economics ($1.504) y FIEL, con un pronóstico de $1.503.
Por ende, estos expertos, que en su mayoría son de consultoras nacionales, esperan un tipo de cambio más alto que el consenso de los más de 40 economistas relevados por el FocusEconomics, que es de $1.394.
«Probablemente, después de las elecciones, el Gobierno tenga que hacer algún rebalanceo en el sector externo. O sea, para poder lograr conseguir el acceso al mercado tiene que mostrar que empieza a comprar reservas, entonces creemos que es factible que después de octubre tenga que volver a adquirir divisas emitiendo pesos», afirma Sebastián Menescaldi, economista y director de Eco Go, que proyecta $1.544 para fin de año.
Y agrega a iProfesional: «Esta situación llevaría a tener más presión en el tipo de cambio, que se ubicaría para el sector externo, en términos reales, un poco más alto. Suponemos que después de las elecciones se rearme el sistema de bandas para que el Banco Central pueda comprar dólares».
En tanto, Lorenzo Sigaut Gravina, director de análisis macroeconómico de Equilibra, que estima un billete mayorista a $1.495 para fines de diciembre, opina: «Consideramos que el tipo de cambio se ubicará en este nivel, básicamente, porque va a haber tensiones cerca de las elecciones, tal como ya vimos como anticipo en julio pasado. Por lo que la divisa se puede ir del centro de la banda hacia el techo».
Asimismo, también advierte que se presentan distintos escenarios, es decir, desde ahora hasta las elecciones habrá un marco determinado en el que el Gobierno no buscará dar un giro en el timón. En cambio, para fin de año se presentará otro contexto, donde habrá más margen de maniobra.
«Incluso, para antes de diciembre va a haber una revisión con el Fondo Monetario Internacional, por lo que puede llegar a haber un cambio en la política económica. Algo que el Gobierno podría pensar hacer después de las elecciones, debido a que es el momento ideal porque estaría lo más lejos posible de la fecha de las presidenciales de 2027″, aclara Sigaut Gravina.
Por lo pronto, los economistas estiman que la inflación de agosto y de los próximos meses se mantendrá en torno al 2% mensual, aunque habrá que estar atento a las reacciones del mercado en los próximos días, tras la escalada de los intereses del capital en pesos, donde se llega a pagar hasta el 50% de tasa nominal anual (TNA) en los plazos fijos bancarios.
«Hay varios escenarios posibles. El que tenemos en cuenta es uno bastante benigno, que supone que al Gobierno le va bien en las elecciones y gana poder político en el Congreso, algo que colabora en que empiece a bajar el riesgo país y que se genere algún grado de ingreso de capitales. Con lo cual, el tipo de cambio no se alejaría demasiado respecto de los niveles que tiene hoy, más allá que, por lógica, sería un poco más alto, pero no llegaría al techo de la banda», proyecta a iProfesional Camilo Tiscornia, economista y director de C&T Asesores, donde prevé un dólar mayorista de $1.402 para fin de diciembre. O sea, un valor similar al valor de consenso del FocusEconomics.
En resumidas cuentas, los desafíos que se presentan para el mercado son saber qué ocurrirá en los próximos días con tasas altas que son inviables para el programa económico. Y también, se suma la incógnita respecto a cómo quedará posicionado el oficialismo luego de los resultados de las elecciones legislativas. Hecho que será fundamental en el impacto que tendrá para la política monetaria.-