La serie sobre Carlos Menem no solo generó repercusiones políticas, sino que reavivó uno de los enfrentamientos más picantes de la farándula argentina: Susana Giménez vs. Graciela Alfano. Todo por un tapado de piel que apareció en una escena y que, según Alfano, le pertenece a ella.
Sus declaraciones en “Puro Show” no pasaron desapercibidas: aseguró que el famoso abrigo, que originalmente pertenecía a María Julia Alsogaray, era suyo y que incluso “lo tiene en su casa”. Esta afirmación fue la chispa que encendió la mecha.
Susana no tardó en explotar y, fiel a su estilo, la insultó en vivo: la trató de “piojosa”, “mentirosa” y hasta la acusó de hacer “brujería”. Ahora, quien tomó partido fue Teté Coustarot, íntima amiga de Susana y figura histórica del medio, quien salió con los tapones de punta a defenderla en una entrevista con Intrusos (América).
“Creo que Susana hizo una catarsis importante de algo que tenía desde hace mucho tiempo. Ella es espontánea, no tiene un doble discurso, siempre expresa lo que siente, y bueno… le pasó eso y lo hizo”, explicó Teté, justificando el descargo explosivo de la diva.
Y fue más allá: “Todo lo que dijo Susana lo suscribo, porque la conozco. Me dio gracia que la tratara de piojosa. Creo que tiene una enorme cualidad: darse cuenta cómo son las personas”. Pero lo más fuerte llegó cuando cuestionó directamente el relato de Graciela Alfano sobre el origen del tapado.
“Este episodio lo conozco porque, en Las Leñas, el fotógrafo me contó cómo fue todo con Graciela Borges y Susana. Alfano no figuraba, no estaba ahí. Creo que tomó velocidad y se cebó un poquito con todo lo que contaba de Menem, y empezó a agregar cosas. Construyó algo que no era así. Nunca nadie había mentido así”, dijo Teté.
Con ese último golpe verbal, Teté dejó en claro que, para ella, la versión de Alfano no solo es falsa, sino que tiene un trasfondo oportunista: “Con ella tenía muy poca relación. Creo que estaba feliz de estar en todos los medios, y ahora va a volver a eso… así que bueno, que la disfruten”, remató, con ironía.
Finalmente, habló sobre la personalidad de Susana y el impacto emocional que tuvo el conflicto: “La gente la conoce. Nunca se la había escuchado tan harta de alguien, pero se hartó. Es humana. Nunca cuento lo que hablo con ella, pero me parece muy bien porque cada uno tiene que expresar lo que siente”.
Con esta intervención, Coustarot dejó en claro de qué lado está en esta pelea defendiendo a muerte a su amiga más íntima y cercana, a décadas del inicio de este escándalo, sigue y sigue dando titulares y no parece tener final cercano.