InicioEconomíaEl fast fast fashion chino que sacude a los reyes de la...

El fast fast fashion chino que sacude a los reyes de la moda

Apareció como un huracán, como casi todo lo que se proviene con fuerza desde China. Y ya se conoce que el aleteo de las mariposas en Beijing provoca temblores.

Es el caso de Shein con su irrupción en una industria como la de la moda con reyes establecidos en distintos segmentos como la española Zara, la holandesa H&M y la irlandesa Primark. Y , por cierto, con muy pocos inocentes.

Shein es una plataforma que ofrece ropa de diseño, la mayoría de las veces copia, a muy bajo precio. Está pensada como un puente para vestir a gente de bajos recursos. Es disruptiva su forma de promoción. Sin sonrojarse coloca una foto por ejemplo de un jean de Zara de US$38 o de Primark de US$ 19 y Shein, igual que la otra plataforma china, Temu; los ofrecen a módicos US$ 11.

Llega al domicilio del comprador por courier al exterior, pero los géneros son de baja calidad y la terminación deja mucho que desear. En la Argentina ya es popular en la base de la pirámide social y gran parte de los 305.000 paquetes que llegaron a la Aduana, son de Shein aunque en valor no es significativo frente a los US$ 6.488 millones importados en mayo que representaron un salto de casi 30% en comparación con 2024.

De acuerdo al Indec sus envíos están englobados en el rubro “resto” que en mayo sumó US$ 63 millones, un salto de casi 200% respecto a un año atrás.

Shein nació en 2015 fundada por Chris Xu, que había arrancado en 2008 con ZZKKO, una plataforma de venta de vestidos de novia. En 2012, se dedicó a la ropa femenina online y en 2015 se convirtió en Shein, ampliando la oferta a la confección para hombres, niños y productos de belleza. La historia de esta plataforma, que no tiene aún locales físicos, está muy relacionada con la de su creador.

Cuenta la leyenda que Chris Xu, 41 años, se formó en la George Washington University en EE.UU. y simboliza a esa nueva camada de empresarios chinos ávidos de innovación y abiertos al mundo. Luego hizo sus primeras prácticas en una empresa de tecnología,Nanjing Dianwei Information Technology, en la provincia de Nankin y se especializó en marketing digital y especialmente en el área de SEO (Search Engine Optimization) que implica destreza de las promociones y la caza de tendencias, lo que está en el ADN de Shein.

Según Forbes, el patrimonio de Chris Xu en 2024 fue de US$ 11.200 millones y Shein está valuada en US$ 40.000 millones. Para el nombre Shein se inspiró en she inside, algo así como ella dentro.

En una Argentina en la que aún las importaciones solo representan el 14% del PBI recién se está haciendo un lugar. En Chile con su economía tan abierta e importaciones que representan 39% del PBI, Shein ya es un golpe para tiendas como Falabella.

Claudio Drescher

Claudio Drescher, titular de la Cámara de la Indumentaria, señala a Clarín: “Es un modelo de volumen y baja calidad, casi de ropa descartable por el uso en una sola temporada que aparece en un momento de caída de ingresos de la población y permite al consumidor de pronto pasar un invierno con tres prendas a US$ 50”.

Dos clientes aguardan ante una de las tiendas de Zara

Shein sacude el tablero global de la industria de la moda y ya provocó “la reacción de Francia que al observar los volúmenes de ingreso de esa mercadería decidió defender su industria textil”, acota Drescher. Así las cosas, Zara cambió la estrategia y salió a diferenciarse escalando un peldaño en calidad y precios, de manera que no les sea fácil copiarse.

En cuanto a la reacción de Francia ante lo que es una verdadera oleada, el presidente Macron impulsó una ley contra este ultra-fast fashion, argumentando que la “velocidad con la que producimos y consumimos moda ya no puede seguir ignorando sus consecuencias ambientales”. Y obliga a esos dos gigantes chinos, Shein y Temu, a rendir cuentas sobre su impacto ambiental para restringir su presencia. Ideo un sistema de “eco-puntuación” que medirá las emisiones, el uso de recursos y la reciclabilidad de las prendas. Y un impuesto especial.

Más noticias
Noticias Relacionadas